Pesca a mosca bajo el puente de Bujaruelo, en el Ara

Aprovechamos el inusual buen tiempo y las tardes aún largas de septiembre para viajar hasta la comarca de Sobrarbe, en Huesca. Nuestro objetivo: la esquiva trucha pirinaica y los espectaculares paisajes que rodean el río Ara, al pie del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido.

El río Ara es el único gran río del Pirineo que no está alterado por la acción del hombre. Ninguna represa se ha llegado a construir en los 70 kilómetros que recorre desde su nacimiento en la ladera sur del Viñamala o Vignemale, a casi 3.000 metros de altura, hasta su desembocadura en el río Cinca, en la localidad de Aínsa.

Podemos dar gracias por su curso inalterado y sus aguas cristalinas a los habitantes de Sobrarbe.

El Gobierno español empezó a estudiar la construcción de una presa en 1951. En 1960 se iniciaron las expropiaciones. Los vecinos lucharon durante décadas y tuvieron que enfrentarse a derribos de viviendas, destrucción de campos, cortes de suministro eléctrico… Se tardó más de dos décadas en desalojar la zona donde se iba a construir el pantano. Se llegó al siglo XXI sin avanzar la obra. Al final, el proyecto se desestimó en 2005.

Así que… ¡nuestro agradecimiento a los habitantes de la ribera del Ara! Con su lucha nos han regalado este río virgen en el paisaje singular de Ordesa, con montañas llamativas y espectaculares.

En septiembre encontramos un caudal perfecto para la pesca, adecuado para cualquier técnica, y especialmente para la mosca seca.

En las aguas cristalinas del río Ara podemos observar bien hermosos ejemplares de trucha. Hacen frente a los largos inviernos pirenaicos con un metabolismo lento y periodos de crecimiento cortos. Son ejemplares, por tanto, de pequeño tamaño. Pero con gran personalidad.

De carácter muy esquivo y desconfiado, asegúrate en primer lugar de llevar ropa poco llamativa y de colores neutros. Camúflate en el entorno.

(Wader Alta Sonic TiZip , Chaqueta Vision Capu Camo, Chest Pact Kowa Devaux).

Este río es adecuado para cualquier nivel por la abundancia de truchas. Pero, avisamos: serán difíciles de obtener. Un pescador experimentado, con conocimientos y técnica, tendrá más oportunidades de obtener numerosas piezas.

En nuestra incursión nos decantamos por pescar a mosca seca. Podemos utilizar cañas largas y bajos de línea también largos, que permiten afrontar mejor las aguas rápidas. Siqueremos asegurarnos de que la mosca tenga menos dragado, una caña larga línea 3 te permitirá hacer unas derivas adecuadas, durante esos días usamos especialmente la caña Devaux T56 10’ 2/3 y una Arcay Otter 9’6 pies 2/3.

En septiembre encontramos un caudal óptimo y no excesiva corriente. Si el caudalhubiera sido más rápido, una ninfa pesada habría sido mejor opción.

La trucha del río Ara es enérgica. Come con ganas en los pocos meses que tiene para alimentarse antes de que llegue el frío. Cuando el pescador consigue engancharla, ya puede prepararse para una buena lucha.

Si los habitantes de Sobrarbe consiguieron derrotar al Gobierno en su lucha por salvar el río Ara, no esperes menos de las truchas que pueblan sus aguas.

Pesca de truchas en las cristalinas aguas del Ara

Pesca de truchas en las cristalinas aguas del Ara.

Pesca a mosca bajo el puente de Bujaruelo, en el Ara

Bajo el emblemático puente de Bujaruelo, en el Ara.

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